¿Puede la Creatina ser clave durante el embarazo? Una mirada científica a su rol en la salud materno-fetal

Basado en la conferencia: Creatine For Women: Insights for Pregnancy and Newborn Health – Dra. Stacey Ellery, Hudson Institute of Medical Research (Melbourne, Australia).

¿La Creatina solo sirve para el gym? Nada más lejos de la realidad.

En una presentación reciente durante el congreso de Creatine for Health, la Dra. Stacey Ellery reveló hallazgos sorprendentes sobre el rol esencial que tiene la creatina durante el embarazo y el desarrollo fetal. Lejos de ser un suplemento exclusivo para deportistas, la creatina podría convertirse en una herramienta clave para la salud materna y del recién nacido.

¿Qué función cumple la creatina durante el embarazo?

Los tejidos reproductivos femeninos, como el útero y la placenta, tienen una altísima demanda energética. La creatina actúa como un amortiguador bioenergético esencial, ayudando a mantener los niveles de ATP (la “batería” de nuestras células) estables incluso durante momentos de alto estrés metabólico.

La investigación muestra que estos tejidos son capaces de sintetizar y almacenar creatina activamente, especialmente hacia el final del embarazo, cuando las demandas energéticas se disparan en preparación para el parto.

¿Qué pasa con la placenta y el feto?

La placenta, responsable de nutrir y oxigenar al bebé, también produce y almacena creatina. En embarazos complicados por restricción del crecimiento fetal o preeclampsia, se observan niveles de creatina más altos en la placenta, lo que sugiere una respuesta adaptativa para proteger al bebé en entornos de estrés.

De hecho, en análisis de cordón umbilical, se encontraron niveles más altos de creatina en bebés que experimentaron partos más complicados, con altos niveles de lactato (un marcador de hipoxia). Esto sugiere que el cuerpo del bebé aumenta naturalmente su creatina para proteger su cerebro ante eventos de baja oxigenación.

¿La Creatina podría proteger el cerebro del bebé?

Estudios preclínicos en ratones y ovejas preñadas muestran que la suplementación con creatina antes del parto reduce el daño cerebral y la actividad convulsiva en los recién nacidos tras eventos de hipoxia severa. Estos resultados abren la puerta a considerar la creatina como una terapia preventiva para embarazos de alto riesgo.

¿Qué mujeres podrían beneficiarse más?

Datos observacionales indican que mujeres vegetarianas, veganas, mayores de edad, con anemia o ciertas condiciones tiroideas, tienden a tener menores niveles de creatina durante el embarazo. Aunque no se observaron consecuencias inmediatas en bebés sanos, sí se vieron asociaciones entre niveles bajos de creatina y menor circunferencia craneal o longitud al nacer, especialmente en mujeres con dietas bajas en proteína animal.

¿Qué viene ahora?

Los próximos pasos incluyen estudios clínicos para definir con precisión cuánto y cuándo suplementar Creatina durante el embarazo. Pero los datos actuales son prometedores: una molécula segura, económica y fácil de administrar podría convertirse en una herramienta poderosa para proteger el desarrollo neurológico del bebé.

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